La e-ciencia como nuevo reto
Del 27 al 29 de junio, la Universidad Autónoma de México acogió a una lista variada de personas para discutir sobre los avances que se han generado en Europa y América Latina en el tema de la e-infraestructura disponible para la ciencia y la educación. Conferencias destacadas, demostraciones con diversos ambientes y herramientas tecnológicas, formas de organización del uso de las tecnologías, proyectos exitosos y otros por emprender, así como un debate de viabilidad política para el apoyo institucional al camino de América Latina en este campo, fueron los temas que le dieron a esta actividad un matiz trascendente.

América Latina activa su camino en servicios de computación avanzada
La Conferencia GISELA-CHAIN fue escenario apropiado para discutir el futuro de América Latina en los servicios de computación avanzada. Autoridades públicas, representantes de las redes nacionales, investigadores y técnicos fueron definiendo algunas ideas posibles. Una primera carta de compromiso para sostener las propuestas en el tema fue una de las mejores conclusiones de este encuentro.

La e-ciencia en beneficio de la humanidad
Durante la Conferencia, la demostración del uso de la e-Infraestructura en beneficio de áreas como la medicina y las ciencias de la tierra estimulan la idea de una plataforma que podría optimizar procesos y lograr resultados más rápidos obtenidos en forma colaborativa en casos como la detección de enfermedades y la alerta temprana de movimientos telúricos; las unidades de atención hospitalaria y los centros de prevención en riesgos y desastres ponen los ojos sobre esta posibilidad.

Los nuevos proyectos
Como proyectos inmediatos que permitan la continuidad de la infraestructura y su uso en América Latina, Federico Ruggieri destacó, al realizar el balance de la Conferencia: Mesoamérica, considerado como el proyecto precursor dirigido inicialmente a América Central, con posibilidades de expandirse; ELCIRA - principalmente orientado a las redes, con posibilidades de cooperación entre Unión Europea y América Latina; y CHAIN, como posible apoyo en el tema de infraestructura regional.

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